
Los bávaros han regresado del parón invernal en peor forma incluso de la que se marcharon y, si este miércoles, el Schalke o el Bremen logran imponerse en sus choques, serán nueve los puntos de renta que tendría que descontar el cuadro muniqués tras su descalabro de ayer ante el Bochum. Los de Magath arrastran un mal endémico en su juego durante los últimos años que no necesita ser rebuscado, la alarmante falta de creación y de nuevas ideas alejadas de las individualidades y del juego directo. Ello, unido a su falta de pegada -o por lo menos no tan acentuada como antaño- y a sus múltiples errores defensivos -algo no tan normal anteriormente-, deja un panorama desolador a poco tiempo del regreso europeo.El punto de partida de este desliz del Bayern lo marcha la marcha de Ballack, que ejercía de líder y retocaba con su carisma los males del equipo, añadiendo además mucha llegada, gol y poder en el juego aéreo. Desde su marcha, han llegado Podolski, maltratado por Magath y Van Buyten, que no ha logrado mejorar el nivel de Ismael -ya de por si bajo- y, ni mucho menos, el de campañas anteriores. El equipo adolece de extras en la delantera, en el mediocentro y en la defensa con un par de hombres, lo que resume que la estructura de la plantilla del, pese a todo, actual campeón de la Bundesliga, está mal estudiada.
Kahn está, seguramente, ante su última temporada y la zaga, que está en la peor racha de los últimos años, hace aguas por las dudas de Lahm, Sagnol o Van Buyten. El alemán ha decaído notablemente en su nivel desde el Mundial y suele tener errores de bulto en la concentración, con pérdidas peligrosas en última línea, algo similar a lo que le ocurre a Sagnol, que incluso ha sido castigado con las gradas. Se salva Lucio, al que, pese a todo, sus constantes arrancadas le han costado toques de atención desde el banco. Además, no hay más centrales salvo Ismael -lesionado y en venta- o incorporar a Demichelis. De nuevo plantilla mal estructurada.En el mediocampo está la base de todos los males. Hargreaves -lesionado y con camino a Manchester- no es creador, como tampoco lo es Demichelis, Karimi, Van Bommel o el 'querido' del técnico, el canterano Ottl. Por ello, Magath ha rebuscado en su plantilla y ha probado hasta con Scheweinsteiger -pese a que pierde quizás a su mejor arma- e incluso con el excelente Scholl. También es cierto que el mercado está ahí y el club no busca remedio con nombres adecuados quizás porque no quiere ese corte de jugador. Aunque no estaría mal replanteárselo porque si el campeón depende de un hombre que ya ha anunciado su retirada...
En la delantera se atisban igualmente cambios a corto plazo. Makaay está realmente sólo en labores goleadoras porque ni Santa Cruz, Pizarro -que se está vendiendo día a día a los grandes de Europa- ni por supuesto Podolski, le están dando el nivel esperado. No hace demasiado, el Bayern sacaba sus partidos adelante por pegada, por más que faltara creatividad, siempre aparecía una jugada a balón parado o un lanzamiento lejano, pero ahora, la eficacia les da de lado. Con este panorama por delante y sabiendo que el gran 'varapalo' de la temporada está aún por llegar, el Allianz se prepara para tiempos duros y de revolución. La Bundesliga está complicada y la Champions es un sueño inaccesible. Hay que empezar de cero.








Pero quiso probar nuevas metas y emigró a España, donde pasó por equipos de nivel muy bajo como Extremadura, Mérida o, ya para terminar, Tenerife (curiosamente los tres equipos descendieron). En todos ellos mostró al público español un especial encanto y manera de sentir el fútbol como una fiesta, más allá de unos miedos que siempre ha admitido tener en cada partido: "Creo sinceramente que sin ese temor a fallar que tengo aún hoy, veinte años después, no podría jugar al fútbol.
Primero, Pato cabeceó al travesaño una pelota a balón parado de Tchó, que tras pegar en la madera tuvo a David en el 'ratón' del área que la llevó a la red. En pleno dominio de los de Nelson Rodríguez (que mostró su presión con los gestos de rabia en cada gol), Pato aumentó la cuenta con otro gran cabezazo, lo que unido a un mal despeje del defensor uruguayo Kagelmacher tras un pase en el área, provocó el descalabro total. Cavani, ya en los últimos diez minutos, anotó con la zurda su séptimo tanto del torneo. Fenomenal registro.
En el partido que completó la noche entre dos de los equipos casi desahuciados, Paraguay remontó a Colombia, que se ha estrellado en esta segunda fase. Pino dejó otra vez su magia con habilidad y un precioso gol, pero los anfitriones sacaron mayor ímpetu y aún pueden obrar el milagro tras los tantos de Acuña (dos) y 'Pájaro' Benítez.
En la primera ruta, los de Walter Mazzarri recibían al Palermo en su difícil Oreste Granillo, un estadio que está acostumbrado a sufrir con la trayectoria de los suyos, que con más o menos calidad, siempre han intentado doblegar a sus rivales, máxime cuando este año la sanción por el escándalo veraniego le sacudió con
En una época en la que se ha recordado el mítico engaño o 'bulo' en el 
Dicho esto, que una vez más se ha vuelto a interponer en la propia competición, el torneo ha aclarado ya dos cosas. Que Chile y Uruguay van a dar guerra hasta el final y pueden perfectamente dar la campanada, y que Brasil, pese a todo, sigue con opciones. Argentina, por otro lado, dio un paso adelante. Esto ya es cosa de cuatro.
Chile ha puesto en jaque a la canarinha esta misma noche, y además, ha convencido a más de uno de que tiene un nivel más que alto. Vidal es ya una de las caras agradables del torneo con sus arrancadas por banda y su capacidad goleadora, así como Medina y el mediocentro Alexis Sánchez, que ha dejado mal parados el solito a todo el mediocampo brasileño. Si hubiera tenido más efectividad en el remate, habría ganado sin problemas a Brasil y lideraría el cuadro.
Claramente favorecido por su agrupación en la
Tras dos días de descanso -para realzar las energías-, regresa esta noche el Sudamericano Sub 20. Vuelve en su fase final, decisiva y de mayor exigencia y nivel. Una última etapa con seis equipos en una misma liguilla hasta lograr un vencedor por puntos, algo que puede quitar tensión a algunos partidos de las últimas jornadas pero que, por contra, puede dejar choques por todo o nada y sin un ápice de conservadurismo.
Este último fue el gran choque previo a la ronda final. Argentina, tal y como afirmó después Hugo Tocalli, tiene la pólvora encendida en ataque y surgen jugadas de gol casi de manera espontánea, peor así mismo, se está dejando resultados en las jugadas a balón parado, ante Uruguay, los tres goles llegaron por ese aspecto a mejorar.
En lo que nos ha mostrado el torneo, que ha sido mejor conforme avanzaba, hay que destacar ya a varios jugadores. El goleador uruguayo Cavani ha sido junto a Cardaccio las mejores apariciones 'charrúas', así como el chileno Medina, el ecuatoriano Caicedo (un auténtico portento físico) o los argentinos 'Maxi' Moralez y Mouche. En Brasil, no han defraudado Leandro Lima o Lucas Leiva, pero se espera más de Alexandre Pato, que pese a todo, y a no haber jugado demasiado, suma tres goles. Aunque de todos ellos, el jugador que más ha lucido ha sido el 'Mago' Pino, el diez colombiano que a buen seguro, encontrará camino a un 'grande' nada más finalizar el torneo.
El luso, tuvo en todo momento
Así pues, sólo hay que ver como una misma situación puede llevarse con la más absoluta normalidad o sacarla de sí hasta límites fuera de cualquier lógica. Aunque la situación en el Inter (líder absoluto del Calcio) y en el Real Madrid no es la misma, el telón de fondo no cuestiona algunos comportamientos viniendo de absolutos profesionales.
Unos minutos antes, Colombia sellaba casi de manera total su pase a la siguiente fase en un partido con dos caras bien distintas. Una, la de una primera mitad con muchas imprecisiones y marcada por la lucha, sin dueño, en el mediocampo, la otra, sencillamente llena de 'magia', la que se inventa el 'Mago' Pino.
No fue nada fácil para Brasil imponerse a Bolivia, teórica 'cenicienta' del grupo y pírrica de cara al marco rival. Lo más destacado fue poder ver en acción, y juntos, a los dos delanteros estrella del cuadro que dirige Nelson Rodríguez, Alexandre Pato y Luiz Adriano, ambos llamados a grandes retos. Esa alineación y la vocación ofensiva de los Lima, Carlinhos o Leiva, daba a entender un buen espectáculo con llegadas continuas sobre el área boliviana, pero no fue así hasta la expulsión del capitán andino Carlos Tordoya, ya en la segunda mitad.
Chile, por su parte, ganó por ímpetu, sacando lo mejor de sí mismo conociendo las opciones de clasificación que aún tenía. Comenzó arrasando con un gol rápido de Medina, pero antes del descanso, Perú igualaba con un penalti anotado por Elías, que supuso la expulsión de Medel. Pese a tener un jugador menos, Chile aguantó una ligera mejoría de Perú, que se perdía en su propia impotencia y terminó por certificar su pase con corazón y gracias a la aparición estelar de Vidal.
Para ejemplificar todo esto basta con notificar que Colombia, que venía de levantar un complicado partido frente a Argentina con carisma, intensidad y valía, se ha estrellado contra la potencia 'charrúa' y un espléndido remate de Cavani, que va camino de ser un nombre propio del torneo -como se esperaba-.
El otro ejemplo del carácter irregular en este tipo de campeonatos, lo mostró Venezuela. Los de Nelson Carrero había sorprendido a Uruguay -ahora líder del grupo- en la jornada anterior, pero dejó escapar sus opciones en una primera parte que fue suya y terminó avasallado ante el ímpetu ecuatoriano. Ayobi, Benítez con un cabezazo y Antón, debieron adelantar a los caribeños, pero Ecuador creció en la segunda mitad, quizás empujado por la idea de que si no vencía, diría adiós al torneo.

Nadie hubiera pensado en ese fin cuando a los diez minutos Argentina ya ganaba gracias a un remate del posible
El jugador revelación del Danubio campeón de Uruguay, fue el estilete perfecto para un combinado necesitado de serenidad para explotar sus ideas. Tras una primera parte muy igualada en la que el ecuatoriano Caicedo llevó peligro a la contra, el potente delantero abrió la lata con un disparo colocado con maestría. Con el tanto, salió a relucir la mejor versión charrúa donde el suministro y control lo ponía Vonder Putten y el empuje Figueroa y el propio Cavani. Ecuador se vio incapaz en defensa y el otro 'obelisco' uruguayo, Figueroa, sentenciaba con su especialidad, un cabezazo inapelable.
La 'Bestia' surgió de la nada y como algunos dicen,
El que quizás fue mejor mediocentro destructor del Brasileirao, Lucas Leiva, iba a celebrar su 20 cumpleaños por todo lo alto. Tan sólo hizo falta que el balón cayera en Leandro Lima -
Este dato no deja de ser un aporte dominante en las últimas etapas o generaciones de Argentina, que crea juego rápido, alegre, de mucho ritmo y con continuas llegadas por banda, pero que a la hora de culminar y definir un choque, ve como su pegada le debilita en numerosas ocasiones. No sólo fue el claro dominador del partido, sino que, por simple empuje, mereció sacar los tres puntos sin demasiados argumentos extra, pero Ecuador, siempre viva por el corto marcador que le ofrecía la nula puntería rival, supo jugarle a la contra.
Así, y dejando marchar ocasiones, Ecuador no le perdió la cara al partido y a la contra avisó, tampoco demasiado, puesto que su principal referencia era no recibir goles. Pero, para justificar el dominio, una desafortunada y extraña jugada dejó un balón aéreo tras fallos en la zaga ecuatoriana, que el delantero de River Plate, Abán, acertó a empujar. El gol fue el mejor bálsamo para los de Iván Romero, que se fue a por el partido dando entrada a Arroyo y Ayovi, pero el primero revolucionó el choque hasta el final, permitiendo reactivar el ataque de la Tricolor y sellando, Rodríguez, una buena jugada colectiva.
Está claro que Brasil viene a ganar este torneo y no especuló lo más mínimo. Pese a que la alineación si fue algo extraña al dejar en el banquillo a Alexandre Pato y Luiz Adriano, el nivel medio es tan grande que siempre surge alguna perla dispuesta a hacerse dueño del partido y ése, fue Leandro Lima. Ante un Edgar fallón, que amarró varias claras ocasiones, tuvo que ser uno de los dos volantes de la canarinha quien levantara los ánimos.
Acaba de cumplir 19 años y ha cuajado una buena campaña en el Sao Caetano, donde sus disparos de media distancia y su capacidad de llegada-entrega, le hacen ser un comodín, que o se explota o se termina utilizando para cualquier problema en la medular. Este pasado Brasileirao anotó siete goles, pero ya a finales de 2005 e inicios del 2006 asomó como titular, de donde no se ha vuelto a caer.
A los puntos mereció vencer el líder. Tuvo el partido en un balón sacado bajo palos de Solano o en un par de acciones milagrosas que Rooney erró -cosa que este año se está multiplicando-, tuvo que remontar a lo campeón con dos golazos de Scholes con sus típicas llegadas en segunda línea y además, lo tuvo que hacer sin Saha, lesionado al cuarto de hora -para dos semanas-, lo que mermó y mucho su pegada por falta de nueve puro.
Dejando a un lado al líder, e incluso al magnífico Liverpool de la segunda mitad en la goleada 