Publicado por
Jose David Lopez
el
martes, diciembre 25, 2007
Hay rincones de la vieja Italia que pasan prácticamente inadvertidos al público turista. Más allá de Florencia, Roma o Venecia, hay lugares que han sabido reservar a buen recaudo aquellos momentos históricos que recuerden para la eternidad lo ocurrido sobre sus pilares. Un pasado romano, medieval o industrial que se ve impregnado de un toque propio y universal en cada una de sus peculiaridades, lo que les hace ser exclusivo respecto al resto.
El norte del país tiene un destacado influyo hacia lo virtuoso y la Lombardía está a la cabeza de todas ellas. Esa corriente ha dejado una sabiduría común en la zona que, al menos deportivamente, viene dejando triunfos con relativa facilidad. Sin embargo, aunque Milan e Inter son los que se reparten esas celebraciones, el auténtico gran reserva lombardo, la exclusividad de ese gourmet único, lo disfrutan en la Leonessa d’Italia, lo reviven en Brescia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario