Poco o nada ha cambiado el discurso en River Plate desde la llegada de Daniel Passarella. El 'kaiser' llegó para engrasar una maquinaria muy venida a menos tras el adiós de Astrada y las incidencias con el 'Mostaza' Merlo, pero lejos de conseguirlo, está inmerso en una crisis deportiva galopante y con serios problemas en lo extradeportivo, ya que la directiva le ha dejado el camino lleno de obstáculos.
En Núñez vienen de interminables problemas con sus barras y con el presidente Daniel Aguilar (que incluso les dio trabajo dentro de su plantel) mirando para otro lado consciente de lo que se le viene. Lo que le cae no es ni más ni menos que la Copa Sudamericana, una eliminatoria que levantar ante Botafogo y con el termómetro en tensión debido a la última derrota (bochornosa) ante el recién ascendido Tigre (4-1).
Todo ello hace que el Monumental sea testigo y juez del futuro de Daniel Passarella en el banco. Y es que si River no da la vuelta a la eliminatoria ante su público y con un ambiente propicio a ello, resulta difícilmente imaginable que al héroe de aquella Argentina del 78 le vuelvan a perdonar la cabeza. La afición le ha perdido el respeto, le insulta sin compasión y no ve en el al líder que pueda levantar la crisis de una institución que hace aguas peligrosamente y cuya realidad pasa por aplacar, al menos en lo deportivo, todas las cábalas ilegales que mantienen en su cúpula, donde reside el gran problema.
Además, se rumorea que el vestuario le ha dado la espalda una vez que decidió otorgar la titularidad a Carrizo en la portería en lugar de a Ojeda (el primero regresó a River sólo por un problema de pasaporte en la Lazio). Esa situación ha originado la ruptura entre ambas partes y Daniel tiene todas las de perder.
Los Millonarios (ya les gustaría serlo en algo más que en la retórica), están obligados a ganar por dos goles ya que cayeron en Río de Janeiro (1-0) y el mismo resultado les llevaría a los penaltis. Ahora, por vez primera, no valdrá el mal de un Boca que cayó eliminado de la competición este miércoles. Toca mirarse el ombligo a sí mismo.
Foto: ESPN
Etiquetas: Copa Sudamericana, Passarella, River Plate
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Pues sí, yo soy de Independiente pero River deberia hacer mas por plantilla e historia. Creo que all final si ha pasado y ha eliminado al Botafogo pero vamos, su futuro es iwal de malo. Que pena.
Pues dicen que el partido ha sido espectacular. Aun asi pienso que Passarella no acaba este año. River tiene trapos sucios por todos los lados y les pillaran.
Vaya que partido! y como decían los comentaristas argentinos después del partido:"la cabeza de falcao salvó, por lo menos por ahora, muchas cabezas".
La verdad es muy triste el presente de river, que creo que no pasa por lo deportivo sino por sus directivos como tú mencionas y esto solo aplaza las cosas un tiempo más...
Saludos!
Perdían 1-2 y remontaron 4-2 Tremendo
La verdad, no esperaba que River remontara de esa manera. Fue por
casta y orgullo. No veo a Pasarella con el modus operandi para mejorar el juego de los millonarios, pero esta victoria les hará bien.
¿Te apetece un intercambio de enlaces, José David?
Un abrazo.
Publicar un comentario